"No se trata de dirigir a alguien, sino de dirigirse uno mismo".
Robert Bresson

domingo, 4 de septiembre de 2011

CLASE II: 02 de Septiembre de 2011

El espacio como mi lugar en el mundo no es una simple construcción. Ese espacio que a simple vista da la sensación de estar vacío y desabrido, es mi lugar. ¿Vacío? Cómo puede estar en ese estado si anteriormente mencionamos que es una sensación. Es decir, un espacio cargado de sentido que nos permita apreciar alguna cosa y al mismo tiempo, lograr percibir una razón de ser, a través de éste.
Sin embargo, para otros ese espacio sigue estando vacío. Es aquí cuando empezamos a hablar de un lugar personal que se llena de subjetividad y ésta genera diferentes reacciones: emotivas, pasionales o de cualquier otra índole.
Es por ello que preferimos hablar de miradas, que se van gestando a medida de que cada individuo va atravesando ese espacio en cuestión. Estas miradas nos ayudarán lentamente a focalizar nuestro rumbo, es decir, definir hacia dónde nos dirigimos para saber qué queremos dirigir. Además, vamos a comenzar a encontrar y construir una identidad auténtica como realizador, mediante nuestra mirada.
De más está mencionar que cada sujeto posee una mirada diferente y consecuentemente, existirán miles de distintas miradas para un mismo espacio.
Cabe destacar que dentro de ese espacio, entran en juego aspectos temporales y de movimiento, complementados por variados elementos, colores, sonidos, personajes y su vinculación o no entre ellos. Estas articulaciones, que cada realizador deberá ir decidiendo, van a contribuir a llenar el espacio de sentido y permitir, finalmente, llegar a nuestro destino final y lograr demostrar que la elección de ese espacio tiene una justificación para que sea mi lugar en el mundo.
En el film “L´Eclisse” de Michelangelo Antonioni se puede interpretar en la última seuencia como una mirada apocalíptica. Allí, el espacio, sin la necesidad de sus personajes que se diluyen y desaparecen, logra continuar con la trama narrativa, acompañado de elementos ya presentados anteriormente como un carro de caballo, una regadera que se prende y apaga, un coche de bebé, edificios, entre otros.

                 L´ECLISSE (1962) MICHELANGELO ANTONIONI


             Mientras, en el film “Con ánimo de amar” de Wong Kar-Wai se puede ver el espacio como ese lugar íntimo, donde se guardan hasta los secretos más importantes. Es en unas ruinas de Camboya donde Chow intenta sepultar su secreto. Éste no es cualquier lugar; sino que fue,  justamente, elegido por el protagonista por ser, además de un templo, un lugar cargado de historia, algo realmente grande como lo es su secreto.

                           CON ÁNIMO DE AMAR (2000) WONG KAR-WAI
 
 

María Luján González Raffino

No hay comentarios:

Publicar un comentario